Utilizar el chantaje emocional requiere de una personalidad narcisista y una total falta de empatía, porque el daño que pueden conservarse a hacer a las víctimas es efectivamente bajo. El primer uso documentado de "chantaje emocional" apareció en 1947 en el Diario de la Asociación Nacional de Decanos de https://conductor-de-camion-en-se00084.blogsidea.com/38035946/detalles-ficción-y-abuso-psicológico